Ranking de “Los mejores bonus levels de los videojuegos”

Porque nos hemos divertido con ellos y muchas veces pasan desapercibidos, es importante que los inmortalicemos en este ranking. Un ranking que podés escuchar en su versión oral en nuestro podcast, en el Stage 6- Level 4.

Para hablar de este tema, es necesario plantearnos antes una “minipolémica”: ¿Por qué hoy en día no existen los bonus stages tal y como los conocemos y los jugamos sobre todo allá por los ‘90? ¿En qué se convirtieron? La respuesta quizás podría ser que mutaron a DLC, eso si consideramos a un Bonus Stage como algo “extra” que obteníamos a lo largo del juego; ahora, si lo asociamos con conseguir la mayor puntuación en un juego, ¿será que directamente se extinguieron porque es algo que “pasó de moda”? Es muy interesante pensar en estas cuestiones, pero mientras hacemos esto, vamos a recordar un poco los clásicos bonus levels que nos deslumbraron en su momento de gloria.

Puesto N°11 -Ice Climber:

Todos recordarán a la parejita de adorables esquimales que batallaban contra un pájaro roba-vegetales. Bueno, el bonus level de este juego ocurría cuando por fin llegabas a la cima, ya que el objetivo del juego siempre era ir para arriba. En esta parte, tenías la oportunidad de atrapar al dichoso pájaro. Si te caías y perdías, se terminaba el bonus y pasabas al siguiente nivel.

Puesto N°10 -Fatal Fury (en su versión Arcade):

Cada dos peleas, este juego tenía un bonus en el que jugábamos una pulseada contra una especie de “maquina de pulseadas”. El bonus consistía en que moviéramos la palanca del arcade para el costado mientras apretábamos frenéticamente uno de los botones en un intento desesperado por ganarle a nuestro contrincante, cuya cara veíamos en el monitor. La dificultad del bonus iba subiendo a medida que el juego avanzaba, al igual que la cantidad de puntos que obteníamos si lográbamos ganar la contienda.

Puesto N°9 -Balloon Fight:

Este bonus consistía en que, elevados por nuestros dos globitos como siempre (o uno si es que habíamos perdido el otro en el nivel anterior), agarrásemos la mayor cantidad de globos posibles. Estos salían de adentro de cuatro tubos al mejor estilo Mario Bros., por lo cual era más fácil agarrarlos a todos si estábamos jugando de a dos. Si conseguíamos no perder ninguno, obteníamos la máxima puntuación. En este bonus podíamos relajarnos un poco, ya que en esta parte no nos acechaba el horrendo monstruo de las profundidades del mar, que tanto miedo me daba de chica, jaja. Debí ponerlo en el ranking de las criaturas más perturbadoras. ¿¡Cómo me lo pude olvidar?!

Puesto N°8 – Galaga:

Los bonus de Galaga me encantaban. La premisa era muy simple: destruir todas las naves enemigas sin que se escape ninguna. Los primeros eran muy fáciles: bastaba con posicionarse en el medio de la pantalla para destruirlas a todas; pero luego tenías que combinar distintas posiciones mientras que las coloridas navecitas hacían su desfile por el espacio. La posta de la vida era haber conseguido tener las dos naves en el nivel anterior, ya que eso facilitaba mucho las cosas.

Puesto N°7 -Toe Jam and Earl – “Hyper Funk Zone”:

En este bonus, Toe Jam corría sin parar por un escenario montañoso, mientras nosotros, lo único que teníamos que hacer era encargarnos de apretar un botón justo en el momento en que aparecía un portal, para hacer que se teletransportara de un lado a otro y así lo evitara. De esta manera, podíamos quedarnos durante más tiempo en el nivel y agarrar los ítems que nos daban puntaje. Mientras más avanzábamos, la velocidad aumentaba haciendo que el bonus se tornara más difícil, y que la cantidad de portales que debíamos esquivar aumentara.

Puesto N°6 – Earthworm Jim, “Andy Asteroids”:

Subidos a nuestra “motonave”, íbamos esquivando asteroides y teníamos que agarrar unas burbujas. Como es habitual en este tipo de bonus, la velocidad estaba relacionada con la dificultad, de manera tal que cuanto más avanzáramos en el nivel, más rápido íbamos a ir y, en consecuencia, esquivar los asteroides resultaba cada vez más complicado.

Puesto N°5 – Los Simpsons (Arcade):

Creo que esta era mi parte preferida del juego: El bonus consistía en inflar un globo -que tenía nuestra cara- apretando botones como un loco, para ganarle a los otros que jugaban contra nosotros. Aquél que lograba inflar más su globo ganaba la competencia, teniendo su momento de gloria cuando salía volando por los aires, mientras que los globos de los demás se pinchaban y hacían que sus dueños cayeran y lloriquearan retorciéndose en el piso.

Puesto N°4 – Sonic 3:

A través de este bonus (si lo terminábamos correctamente) podíamos acceder a una de las tan preciadas esmeraldas que nos harían convertir en Super Sonic. Nuestro puercoespín azul favorito (de todos menos de Diego de Carlo), en este nivel, corría hacia adelante sin parar y nosotros nada más podíamos moverlo hacia la derecha o izquierda mediante un rápido giro. El objetivo era pasar por encima de las esferas azules para convertirlas en rojas, ya que, si lográbamos cambiar el color de todas, luego se transformaban en argollas, y si agarrábamos todas las argollas, obteníamos la esmeralda. Como nuestros movimientos en este bonus eran muy limitados, corríamos el riesgo de tocar una de las esferas que ya habíamos convertido en rojo; si hacíamos esto, perdíamos automáticamente. A medida que avanzábamos en el juego, la velocidad del bonus se aceleraba, cosa que lo hacía más difícil. Había que tener muy calculados y estudiados los movimientos, ya que era muy fácil perder.

Puesto N°3 – Aladdin (Sega Genesis): “Abu in Agrabah”:

En este divertido bonus level, controlábamos a Abu, el mono de Aladdín. El objetivo era esquivar unos jarrones que caían y saltar unos barriles, para agarrar aquello en lo que estábamos interesados: manzanas y diamantes. Si alguno de los mencionados objetos peligrosos nos tocaba, perdíamos el bonus automáticamente, continuando con el nivel que correspondiese. Al ir avanzando en el juego, teníamos de cuando en cuando nuevos bonus de este estilo con Abu, pero eran cada vez más complicados, ya que aumentaba la cantidad de jarrones y barriles que había que esquivar, exigiéndonos una mayor destreza gameril.

Puesto N°2 – Street Fighter 2:

El clásico de clásicos, puntero de todos los rankings (pero no en el mío, aunque casi). ¿A quién no le encanta destrozar un auto a sus anchas, o tal vez- por qué no- un gran bloque de piedra?

Curiosidad: Este bonus, en realidad, apareció por primera vez en otro juego de Capcom, el Final Fight (originalmente de Arcade, aunque fue posteriormente porteado) en el año 1989. Pero por alguna razón, el bonus sólo se popularizó con Street Fighter.

Puesto N°1 – Mortal Kombat: “Test your Might”:

En Mortal Kombat, cada tanto, nos distendíamos de la subida por la torre rompiendo con nuestras manos diferentes materiales (madera, piedra, rubí, diamante, un yunque…) para probar nuestra fortaleza, tal y como dice el título del bonus. Otra vez era hora de poner en juego nuestra destreza apretando botones. Sólo aquellos que conseguíamos salir airosos en este bonus éramos capaces, años después, de salvar a Meryl resistiendo la tortura de Ocelot. 😉

Vani disfruta de los videojuegos desde muy chica. No tiene especial preferencia por una consola en particular, pero jugó más en las consolas de Sony. Su género favorito es el Survival Horror, pero también le gustan muchos juegos de aventura y acción. Además de formar parte de Checkpoint, tiene un emprendimiento llamado Miss Pacman, a través del cual vende ropa y accesorios con temática Gamer. Fuera del ámbito, trabaja en un colegio secundario y está por recibirse de profesora.