De Iridium Studios y luego de un exitoso Kickstarter, llega este hermoso juego de estrategia en tiempo real controlado por nuestra voz, un feature interesante, pero a la vez limitador.
There Came an Echo empieza bien: debemos ayudar a Corrin, quien trabaja en una empresa de tecnología, a escapar de su oficina. Él es el inventor de un sistema de encriptación llamado Radial Lock, y quienes lo persiguen, lo buscan para que quiebre el sistema, que según él, es irrompible.
Si por alguna razón no te das cuenta de la referencia a The Matrix, no te preocupes, porque la vas a oír, la vas a leer y el primer achievement hace referencia a ello.
Lo interesante es que no controlamos a Corrin, sino que somos SAM, y nuestra tarea es guiar a Corrin utilizando la ayuda de VAL, otra entidad como nosotros. Más interesante aún, es que debemos hacerlo utilizando nuestra propia voz; sí, utilizando palabras que salen de nuestra boca.
Corrin revisando la nueva web de Checkpoint cuando es interrumpido por VAL.
Mediante comandos como, “Corrin, ve a Alfa 1”, hacemos que éste se mueva.
Los marcadores alfanuméricos donde podemos mover a los personajes.
Para poder disfrutar el feature principal de There Came an Echo será necesario un buen micrófono o headset, y dominar el idioma inglés ya que el juego sólo puede controlarse mediante ese lenguaje.
Luego de una breve calibración de micrófono y nuestra voz, un pequeño tutorial, nos encontramos hablándole a Corrin.
En ciertos lugares del mapa aparecerán unos marcadores alfanuméricos, Alfa 1, Beta 2, etc. Mediante comandos como, “Corrin, ve a Alfa 1”, hacemos que éste se mueva. “Corrin, cambia a pistola” para cambiar de arma. “Corrin, concentra fuego en enemigo 2” para disparar a un enemigo en particular.
Por supuesto que Corrin no es el único personaje que podemos controlar, ya que eventualmente se sumarán más personajes al elenco del juego.
Existe un sistema alternativo para controlar el juego con el mouse.
Utilizar nuestra voz en un juego, tiene su encanto. Al momento de presentarnos ante Corrin, VAL nos dice “Di Hola, Sam!”, y si decimos “Hola Sam!” VAL nos dirá que somos muy graciosos.
Cuando el sistema de voz funciona, se siente muy natural y cómodo no tener que interactuar con el juego mediante teclado o mouse, aunque sí es necesario desplazar el cursor para poder recorrer el mapa. Sin embargo, para hacer Zoom, podemos decir “zoom in”, para pausar el juego decimos “pause”. En el menú de pausa contamos con una lista de comandos utilizables siempre que queramos consultarla. Podemos encolar comandos, y hacer que se ejecuten al decir “mark”.
Además de los comandos preestablecidos, podemos agregar comandos propios, llamados alias. Si en vez de Corrin, queremos decir Pepe, podemos hacerlo, pero siempre pronunciando en inglés.
Cuando el sistema no funciona, nos vamos a sentir muy impotentes. Podemos perder segundos muy valiosos en una estrategia clave. VAL nos va a indicar si hablamos muy fuerte o demasiado bajo, y en los primeros niveles veremos la lista de comandos que son recomendados utilizar, en la interfaz gráfica. Existe un sistema alternativo para controlar el juego con el mouse, al hacer click derecho aparece una rueda con comandos posibles, pero utilizarlo hace que There Came an Echo pierda su mayor gracia.
Como todo juego de estrategia, rodear al enemigo es algo muy útil.
Además del modo historia del juego existe el War Room, donde podremos practicar contra olas de enemigos.
El recurso del comando por voz trae aparejado un problema grave de diseño. Sólo podremos mover a nuestros personajes a las áreas designadas, y rápidamente las estrategias se sienten repetidas. Al ser un juego en tiempo real, y no pasivo, en momentos de mucha tensión podemos confundir un comando, personaje o área, logrando que la situación se torne inmanejable muy rápidamente.
Los personajes tienen escudos que podremos recargar hasta dos veces por partida. Cada clase de arma está diseñada para una situación particular, tales como efecto de área para dañar varios enemigos, sniper para matar un enemigo cuando su escudo esta bajo y disparos rápidos para obligar al enemigo a mantenerse escondido.
Al terminar cada misión tenemos la opción de equipar distintas mejoras a cada personaje para variar la jugabilidad.
El elenco de There Came an Echo
La historia es entretenida y fácil de seguir, con alguna que otra vuelta de tuerca. El juego en sí no es demasiado largo, contando con una duración de entre seis y siete horas. Gráficamente el juego se ve bien pero no deslumbra, es 3D y tiene un estilo con aspecto de haber sido pintado a mano, donde predominan los naranjas, rosas y celestes.
Tratándose de un juego que ocurre en el futuro, la interfaz gráfica es clara y precisa. La música es bien futurística. Podemos además, disfrutar la voz de Wil Wheaton, a quien quizá recuerden por Star Trek: The Next Generation, The Guild y por ser el archienemigo de Sheldon Cooper en The Big Bang Theory.
Además del modo historia del juego existe el War Room, donde podremos practicar contra olas de enemigos, perfeccionar estrategias y memorizar los comandos más utilizados.
Encontramos un único problema que ocurre al jugar con parlantes, frecuentemente el sistema de voz se retroalimenta y se ejecuta el comando “pause” que pausa el juego, lo cual es bastante molesto. Por supuesto, esto no ocurre al jugar con auriculares.
Al momento de escribir la review, Iridium Studios se compromete a mejorar la detección de voz y eventualmente agregar soporte para otros idiomas, además de preparar el lanzamiento en PS4. Estas acciones se hacen evidentes por los posteos de los desarrolladores en la comunidad de Steam.
There Came an Echo es un juego ambicioso, como debería serlo todo indie, sobre todo luego de recibir el soporte de la comunidad y conseguir completar y superar el gol de su Kickstarter. El usar la voz es algo ingenioso y se acopla muy bien con un juego de estrategia, pero esas pocas veces que no nos detecta, o confunde nuestro comandos hacen que pierda todo lo bueno. Los juegos de estrategia no son mi fuerte, pero es simple ver que si algún día llegamos a ver la secuela de este juego, podríamos llegar a hablar de un gran ejemplo del género, ya que los desarrolladores mostraron que con pocos recursos son capaces de hacer un juego innovador y completo.
[Update 1.0.6] En la última actualización del There Came an Echo se incorpora soporte para comandos de voz en Español, Alemán, Italiano y Francés. Originalmente el juego estaba puntuado con 7, con un punto negativo por soportar únicamente Inglés. Además se mejoró notablemente la detección de voz. Luego de estas actualizaciones subimos el puntaje a 7.5.
¿LO JUEGO?
Si, sobre todo si los juegos de estrategia son lo tuyo.
Y Checkpoint Radio que opina?
Hermosa premisa, pero con los problemas típicos que uno puede imaginarse. En su momento disfruté mucho el Tom Clancy’s Endwar, aunque también debía contar hasta 10 para sobrellevar problemas semejantes a los expuesto por Fede. Igualmente, resulta una experiencia que no debería dejarse pasar por alto.
No soy de este tipo de juegos, pero me llama la atención muchísimo. A diferencia de Guille, nunca jugué un juego de este tipo. Teniendo en cuenta que va a salir en PS4, esperaré la versión de para mi consola favorita y seguramente le dé una oportunidad.
Los juegos que innovan de alguna manera se merecen mis respetos. En este caso, especulando por lo que leo en la review, se lo nota un poco forzado. El hecho de que a veces no detecte, el feedback o que, para utilizar el sistema de voz, que las posiciones estén prefijadas, hacen que me de la sensación de que es más un chiche en sí mismo que un elemento de gameplay interesante. Sumado a todo esto, me siento muy goma hablándole en mi inglés cavernícola a la pantalla, por lo cual seguro lo pruebe un rato por curiosidad y lo termine jugando con mouse.
