Hace años que existe la tecnología inalámbrica en periféricos para PC, pero nunca fue hecho de esta manera. El Logitech G502 Lightspeed rompe con la barrera del delay de una manera en la que otros nunca lo han hecho, y sin perder las lucecitas RGB que tanto te gustan.
Hace rato que Logitech apuesta por un mouse sin cable. Modelos como el G305, G903 y G Pro son todos excelentes productos que demuestran el esfuerzo por parte de la empresa a la hora de subir la escalera de la innovación.
Para no quedarse atrás, el lanzamiento del G502 Lightspeed siguió hace unos meses. Imitando lo que antes había funcionado en sus predecesores, este producto no falla en mucho y excede en lo más importante en cuanto a mouses inalámbricos: cortar el cable.
Laterales de goma para mejor agarre.
Pesas incluidas.
Una de las primeras preocupaciones que uno puede tener a la hora de comprarse un periférico inalámbrico es el delay, especialmente para juegos competitivos en géneros como FPS, donde cada milisegundo cuenta y el tiempo de respuesta no debe ser un problema.
Acá es donde el Lightspeed (Velocidad de la Luz) se gana su nombre. Con sólo un milisegundo de delay logra el mejor resultado que existe en el mercado hasta hoy. A decir verdad, en ningún momento pude notar la diferencia entre este mouse y uno con cable, y ni hablar de que mi rendimiento no sufrió ningún deterioro, que es lo importante.
Otra de las preocupaciones que uno puede tener es la batería. Al no tener un cable conectado constantemente, el mouse requiere otra fuente de energía. En este caso Logitech dice ofrecer hasta 48 horas de vida con las luces prendidas y hasta 60 horas sin las luces. Al probarlo, puedo confirmar que los números reales rodean los estimados. Ni hablar de que carga rápido: 2,5 horas de uso en 5 minutos de carga.
Y para aquellos que no quieren ni pensar en cargar un mouse, existe una alternativa sencilla, pero costosa. Logitech Powerplay es un mousepad que sirve como plataforma de carga, de esta manera nunca más vas a tener que preocuparte por quedarte sin batería. Todo esto por el modesto precio de USD$100 (estimado).
Por productos premium, uno espera pagar precios premium, y el Logitech G502 Lightspeed no es la excepción (USD$150, estimado). Uno de los pocos puntos negativos que le vería es justamente el precio, que aunque hasta cierto punto se ve justificado, no puedo dejar de pensar en otras alternativas mucho más baratas que no pierden tanta funcionalidad.
Aun así, uno tiene que pensar que Logitech pusó todas las cartas en este mouse. El resultado es mayor rendimiento y menor tiempo de respuesta y, para variar, una reducción de peso comparado con el modelo anterior.
Uno pensaría que agregarle una batería al mouse haría que fuera mucho más pesado, pero Logitech logró completamente rediseñar y reconstruir la estructura interna del mouse sin cambiar nada de la estética, y perdiendo un par de gramos en el proceso.
Compatibilidad Powerplay.
Endoesqueleto rediseñado y reconstruido.
Aun con la reducción previamente mencionada, el peso puede ser una gran advertencia: 114 gramos hoy en día es mucho más de lo ideal para lo estándar.
Alternativas como el Glorious Model O- llevan 58 gramos encima, algo mucho más común en este tipo de productos diseñados para gaming. Así que si preferís un mouse con menos peso, como la gran mayoría de los jugadores de FPS, el Logitech G502 Lightspeed no es tu mejor opción.
Todo lo que incluye este mouse se ve amplificado por el software gratuito descargable. Logitech G HUB es una excelente herramienta que te permite fácilmente programar botones y crear macros, así como descargar configuraciones creadas por otros usuarios.
Apenas dejé el Logitech G502 Lightspeed extrañé muchas de sus funciones. Esto y todo lo anteriormente mencionado me da a entender el nivel de innovación manejado por Logitech. Esta misma innovación es la que deriva en un precio elevado, aunque para quien tenga el presupuesto, vale cada centavo.
